El control de calidad en el moldeo por compresión es fundamental para garantizar el rendimiento constante del producto, la precisión dimensional y la integridad estructural.con un contenido de aluminio superior o igual a 10 W,, para verificar su conformidad con las especificaciones requeridas, incluida la viscosidad, el contenido de humedad y las propiedades de curado.
Durante el moldeado, los parámetros del proceso, como la temperatura, la presión y el tiempo de curado, deben controlarse con precisión.o relleno incompletoPara mantener la uniformidad, las máquinas se calibran regularmente y los moldes se inspeccionan para detectar desgaste o daños.
Las inspecciones en el proceso se llevan a cabo mediante controles visuales, mediciones dimensionales y métodos de ensayo no destructivos como el análisis ultrasónico o de rayos X para detectar defectos internos.Los controles de calidad posteriores al moldeado incluyen ensayos mecánicos (.g., pruebas de tracción, flexión e impacto), inspección de acabados de superficie y verificación dimensional utilizando herramientas como pinzas o máquinas de medición de coordenadas (CMM).
El control estadístico de procesos (SPC) se aplica a menudo para monitorear las tendencias y detectar las desviaciones temprano.La documentación y la trazabilidad se mantienen durante toda la producción para garantizar el cumplimiento de las normas de la industria y los requisitos de los clientes.
El control eficaz de la calidad en el moldeo por compresión minimiza los residuos, reduce el retrabajo y mejora la fiabilidad del producto, lo que lo hace esencial para aplicaciones en automóviles, aeroespacial, eléctrico,y de bienes de consumo.