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Los camiones volquete de la correa eslabonada son renombrados para su capacidad de acarreo. Con las capacidades de carga grandes extendiéndose de varias toneladas a más de 30 toneladas, estos camiones son capaces de llevar cantidades sustanciales de material en un solo viaje. Esto los hace bien adaptados para los usos resistentes tales como explotación minera, construcción, y proyectos en grande del movimiento de tierras.
La flexibilidad de los camiones volquete de la correa eslabonada es aumentada por su capacidad de atravesar cuestas escarpadas y el terreno desigual. La combinación del tren de aterrizaje seguido y del motor potente permite que el camión suba las pendientes que serían difíciles o imposibles para los vehículos rodados. Esta capacidad es especialmente valiosa en las minerías, donde los materiales necesitan ser transportados de excavaciones o de ubicaciones remotas profundas.